1) Escribe una trama que a ti te guste desarrollar, es decir, haz la historia en función como la has planeado para que te entusiasme y tengas deseos de desarrollarla.
2) Crea un hecho relevante desde el principio, al iniciar tu novela es esencial que desde el primer capitulo presentes un gancho al lector, ya sea un accidente, misterios, secretos, sorpresas que haga cautivarlo y desee descifrar todo a lo largo de la historia.
3) Debes saber si brindar el aspecto físico de los personajes o no. Existen muchos autores que por lo general presentan al personaje y no describen su aspecto físico y cuando lo hacen ya es muy tarde por lo que obligan al lector a tener que cambiar su apariencia y resulta incómodo por lo que antes de plasmarlo debes tener en cuenta si vas a describir profundamente o sólo algunos rasgos.
4) Deja que los personajes desarrollen la historia por ti, es importante dar vida propia a los personajes de la novela, asignando un nombre, apellido, aficiones, hobbies y un tipo de conducta o desenvolvimiento en la sociedad, ya logrado esto y con ayuda de los diálogos siempre resultará fácil generar el hilo de la novela ya que serán ellos que mediante sus actitudes van a atar y resolver sus conflictos para llegar al final.
5) Y lo fundamental... cuando culmines tu novela dedica un tiempo de descanso para ti y para ella así vas a despejar la mente para que en el corto tiempo después la leas y puedas hacer las correcciones necesarias.
